¡Diciembre ya casi se fue y 2016, conmocionado despidió a Shimon Peres y Fidel
Castro
Estado, entidad
política en la que vivimos en el mundo contemporáneo, y que en las primeras
décadas del siglo XXI vive épocas complejas, vio, en 2016 partir a dos grandes estadistas
que dirigieron naciones muy distintas, en regiones muy distantes, pero ambos determinantes,
local y globalmente: Shimon Peres y Fidel Castro
En Israel, el 28 de septiembre moría Shimon Peres, expresidente
de Israel quien pensó e intento establecer la paz entre palestinos e israelitas.
Peres fue uno de los líderes que negoció los acuerdos de paz de Oslo de 1993
entre Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), por el
cual le fue otorgado el Premio Nobel de la Paz 1994. Siempre expuso que: “Palestina
e Israel pueden ser sus amigos".
Shimon Peres, nació en Polonia, el 16 de agosto de
1923, Peres (su apellido original era Persky) se trasladó a Palestina con sus
padres en 1934. Como protegido de David Ben Gurión, primer jefe de gobierno de
Israel, con lo cual pudo evitar el holocausto judío de los años cuarenta. Ocupó
diversos casi todos los cargos de gobierno importantes en Israel desde que este
fue fundado en 1948. En abril de 1977 fue nombrado líder del Partido Laborista
y tras las elecciones generales de julio de 1984 se convirtió en Primer Ministro de Israel,
durante siete décadas supo mantenerse vigente en la política de Israel. Fue dos
veces primer ministro y presidente entre 2007 y 2014.
Con los acuerdos de paz, Peres pretendió llevar la
concordia y estabilidad al estado de Israel, objetivo nada fácil, nunca cesó en
consolidar su ideal y creó un Centro para la Paz que lleva su nombre con el que
buscaba acercar a los palestinos y los israelíes. Al mismo tiempo que extendía la mano para la
paz, Peres nunca abandonó la idea de que Israel tenía que mantener una fuerza
militar poderosa para negociar desde esa posición, su habilidad diplomática le
hizo acreedor al Premio Nobel de la Paz y ser reconocido internacionalmente,
pero en la política doméstica no gozaba de la misma popularidad.
En Cuba, Raúl Castro, Presidente de aquel país y
hermano del comandante, anunciaba: "Con profundo dolor comparezco para
informarle a nuestro pueblo, a los amigos de nuestra América y del mundo que
hoy, 25 de noviembre del 2016, a las 10.29 horas de la noche falleció el
comandante en jefe de la revolución cubana Fidel Castro Ruz", así fue
como, emocionado, anunció a los cubanos y al mundo la muerte del histórico líder
de la revolución cubana. Una muerte que, si bien, no era sorpresiva conmovió a todos.
Después de que el Ejército Rebelde de Fidel Castro derrocara
al dictador Fulgencio Batista en 1959, Castro se hizo sentir más allá de los límites
de los que podía ser su pequeña isla natal. Se alío a la Unión Soviética en
plena Guerra Fría y su estratégica ubicación le convirtió en una estratégica nación
a partir de su victoria. Su actuar político siempre apuntó a desafiar abiertamente
abierta, con palabras y hechos, la hegemonía de Estados Unidos en América
Latina.
La muerte de Fidel Castro era el colofón de más de
sesenta años de historia, en las cuales, transformo a Cuba. Su postura “antiimperialista”
lo convirtió en una figura clave de la Guerra Fría, lo que le trajo vehementes
seguidores y enardecidos enemigos.
Para bien o para mal Fidel Castro le dio una nueva
identidad a Cuba, desde los años sesenta y hasta la caída del bloque comunista,
fue el gran aliado marxista en América y sin duda era el gran dolor de cabeza
de los estadounidenses, con ello les cerraron las puertas a los cubanos y
llevaron a varios países a mantener un férreo bloqueo político y económico,
haciendo de la “isla caribeña, una isla”. El momento más álgido fue el la
llamada “crisis de los misiles de 1961” que detuvieron al mundo. Cuando el comunismo
murió Cuba volteo al otro país imperialista Venezuela, y durante algunos años
fue apoyado por aquel país lleno de “mises Universo” y petróleo, La alianza con
Hugo Chávez en el 2000 fue determinante para fortalecer a los líderes
sudamericanos y que estos pudieran llevar las izquierdas al poder, siempre
viendo a Estados Unidos como el gran enemigo.
En febrero 2008, Castro anunció su decisión de
renunciar, su hermano Raúl Castro sería el sucesor. A partir de entonces Cuba
ha tenido cierta apertura al mundo. Fidel hizo creer a los cubanos que eran
distintos y especiales.
El 30 de noviembre, en la Plaza de la Revolución de la
Habana, decenas de líderes mundiales y miles de cubanos con rostros de tristeza
despidieron gritando "¡El pueblo
unido jamás será vencido!" y ¡Yo soy Fidel". Ahora que Fidel no está,
¿Que será de los cubanos invadidos de creencias, contradicciones, carencias y romanticismo?...
sin Fidel Cuba no volverá a ser igual.
Aunque en circunstancias muy distintas, con escenarios
muy diversos, problemáticas incomparables y personalidades sumamente
diferentes, y todo haga parecer que Fidel y Peres no se parecen en nada, existen
vínculos entre ambos personajes que les hacen determinantes para la política
mundial en la segunda parte del siglo XX: ambos fueron dos de los más
importantes estadistas del siglo XX; ambos fueron fervientes creyentes de sus posturas
políticas; y los dos tuvieron críticos y fuertes detractores que les convierte
en personajes de claros oscuros. Que “by the way” en la vida es lo más normal
una persona no puede ser “buena-buena-buena o mala-mala-mala”, todo depende del
cristal con que se mira, y en el caso de estos dos personajes, ambos tenían su acérrima
contraparte. En el caso de Shimon Peres su opuesto era Palestina. En el caso de
Fidel Castro, su contrario, Estados Unidos, postura enfrentada que se evidenció
mundialmente durante la Guerra Fría.
2016 despidió a Shimon Peres y Fidel Castro, dos
grandes estadistas determinantes para el siglo XX.
… por su atención, mil gracias
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